Este entorno se puede describir como un mosaico donde dominan sembrados de cebada y de trigo, recortados por algunas hileras de árboles de margen (olivos y almendros), márgenes de piedra seca, pequeños carrascales dispersos y algunos barbechos y baldíos. "Les cabanes de volta" las peceras que surcan el curso del río Sió, los rediles, las balsas y otros elementos arquitectónicos populares son también rasgos que forman el peculiar carácter de este territorio. Salpicado de pequeños pueblos de origen medieval, los castillos y las iglesias románicas son el elemento patrimonial e histórico más notable; algunos de los castillos están bien conservados.
Uno de los atractivos paisajísticos es la amplitud de los horizontes y los cielos de colores que se pueden observar, como las noches estrelladas. El transcurso del año nos brinda un paisaje tan vivo y cambiante que, a veces, nos puede dar la sensación que no es el mismo. Cada estación tiene sus colores característicos: la magia inquietante de la niebla en invierno, el verde e colorido esplendor de la primavera, el amarillo intenso de las espigas, las balas de paja y el rastrojo durante la época de siega o en el otoño, terroso y más pálido.
Este espacio natural cuenta con el "Centre d'Interpretació dels Plans de Sió", ubicado en el Castell de Concabella, que nos permite acercarnos a los secanos aprendiendo que son los ambientes esteparios, como es este paisaje, su fauna y, especialmente, cuales son las aves más características y porqué es tan importante preservar estos ambientes para protegerlas. También podemos ver algunos itinerarios para descubrir de cerca este medio.
FLORA Y VEGETACIÓN
La vegetación de Plans de Sió se caracteriza por estar específicamente adaptada a unas difíciles condiciones que le confieren su carácter estepario: una escasa pluviometría, suelos áridos, salinos y yesosos y un clima de fuertes contrastes entre invierno y verano.
La tradición agrícola es la que más profundamente ha transformado el paisaje y su vegetación. Actualmente, el 97% de la superficie del espacio natural es usada para cultivar, mayoritariamente cereales como el trigo y la cebada.
La vegetación natural se conserva en los márgenes, baldíos y barbecho, que son de gran importancia por su particularidad. Esta zona están formada por matorrales de romero con alipo (Globularia alypum), de lastón (Brachypodium retusum) de tierra baja y de esparto (Lygeum spartum) y también algunas maquias y carrascales con enebros (Juniperus oxycedrus) o juncares. También hay una gran variedad de flora liquenácea.
El paso de las estaciones nos lleva a una metamorfosis de colores del paisaje, coincidiendo con los ciclos vitales de las plantas: esplendor verde y de colores a la primavera, amarillos i tostados en verano y colores cenizos y pardos en otoño e invierno.
Podemos describir la flora y vegetación de este espacio como un mosaico donde conviven distintos ambientes:
- En los campos agrícolas, mayoritariamente, se cultivan cereales de invierno, como son la cebada y el trigo, también oleaginosas como la colza y leguminosas como los guisantes. También hay campos de árboles, sobretodo de almendros y olivos.
- En los márgenes podemos encontrar algunos frutales medio silvestres como, por ejemplo, higueras, membrilleros, granados, serbales, morales, almezos, nogales o cerezos.
- Dentro de los campos crecen, las mal nombradas "malas hierbas" o hierbas espontáneas. Algunas de ellas son comestibles y tienen propiedades medicinales: amapolas, ballueca, paspayás, panizo velloso, grama, verdolaga, sorgo, malva, trébol, lechuguilla, altamandría y manzanilla silvestre, entre otras.
- En los bosques y baldíos encontramos carrascales y árboles perennifolios, sobre todo encinas (Quercus ilex) y enebros (Juniperus communis), pero también podemos encontrar robles, pinos y sabinas (Juniperus phoenicea).
- Entre los árboles de las malezas, en los márgenes y baldíos, también se pueden encontrar una gran variedad de plantas medicinales y aromáticas, como el timón, la manzanilla o el hinojo. I también otras matas: aulaga, cardo corredor, espino albo, zarza y muchas más.
- Los bordes del río Sió están poblados de árboles caduciofolios: fresnos (Fraxiunus angustifolia), olmos (Ulmus minor), álamos (Populus alba), sauces (Salix alba), saucos (Sambucus nigra), chopos (Populus nigra) y acacias (Robinina pseudoacacia). En esta umbrías y lugares húmedos abundan el carrizo (Phragmites communis), la caña (Arundo donax), juncos (Scirpoides holoschoenus), violetas (Viola alba) y en algunos lugares la boga (Typha angustifolia) y los lirios silvestres. Cerca del río también encontramos la mayoría de huertos familiares.
La escasez de los ambientes naturales y la profunda transformación agrícola del territorio hace que algunas de las plantas típicas de los secanos estén muy amenazadas. Su situación mereció que las catalogaran como especies amenazadas y fueran incluidas en el Catálogo de flores amenazadas de Catalunya.
FAUNA
"Els Plans de Sió", igual que el resto de los secanos de Lleida destacan por la única presencia en Catalunya de algunas especies de aves. Por este motivo este espacio naturals es también ZEPA, Zona Especial de Protección de Aves. Las especies designadas como prioritarias son el sisón (Tetrax tetrax), la carraca europea (Coracias garrulus), la clandira (Mimus saturninus), el cernícalo primilla, (Falco naumaniii) y el aguilucho cenizo (Circus Pygargus). En el apartado de ornitología lo explicamos con más detalle.
Por otro lado, encontramos muchos otros grupos de animales:
Aves, pájaros o moixons
Entre los más pequeños hay el triguero (Emberiza clandara), el colirojo (Phoenicurus sp.), la cogullada (Galerida cristata), el vencejo (Apus apus), la golondrina (Hirundo sp), la terrera (Calandrella cinerea), el gorrión (Passer domesticus), el paradillo (Carduelis cannabina), la lavandera blanca (Motacilla alba), el pinzón (Fuingilla coelebs), el avión roquero (Ptyonoprogne rupestris), el ruiseñor (Luscinia megarhynchos), el jilguero (Carduelis carduelis) y el escribano soteño (Emberiza cirlus).
También hay el cuervo (Corvus corax), el cuco (Cuculus canorus), el abubilla (upupa epops), el arrendajo (Garrulus glandarius), la urraca (Pica pica), la grajilla (Corvus monedula), el estornino (Sturnus vulgaris), el mirlo (Turdus merula), los micamaderos, el chotacabras collirrojo (Caprimulgus ruficollis), la gallineta común (Gallinula chloropus), la gallareta (Folicula atra), la paloma (Columbia livia), la tórtora (Streptopelia turtur), la torcaz (Columba palumbus) y el zorzal charlo (Turdus viscivorus). También encontramos la perdiz (Alectoris rufa) y la codorniz (Coturnix coturnix), ambas aves gallináceas.
De aves rapaces, encontramos el gavilán común (Accipiter nisus), el águila perdicera (Aquila fasciata) y aves nocturnas como el búho (Athene noctua), la lechuza (Tyto alba) y el autillo (Otus scops).
Mamíferos
Conejos de bosque, zorros, tejones, mustelas, erizos, murciélagos, ratas, ratones, topos, jabalíes y corzos.
Amfibios i réptiles
Serpientes como la víbora, serpiente blanca y la serpiente verde. Lagartos, lagartijas, salamanquesas, y amfibios como los sapos y las ranas.
Artrópodos, moluscos y otros bichos
Grillos, cigalas, moscas y mosquitos. Tijeretas, hormigas, cochinillas, saltamontes, escarabajos, mantis, abejas, avispas, mariquitas, libélulas y polillas; arañas, pulgas y garrapatas; lombrices, orugas, y zapateros; caracoles, caracolinas y babosas.
AVES (ORNITOLOGÍA)
Las aves esteparias dependen de condiciones muy especiales para poder obtener refugio y alimento. El espacio natural Plans de Sió reúne estas condiciones y por eso, es un reservatorio de algunas especias de aves específicas que solo están presentes en estos secanos de Catalunya. Este espacio forma parte de la Xarxa Natura 2000 y es una zona especial de protección para las aves (ZEPA).
Aún así, este tipo de ecosistema que encontramos en el espacio natural de Plans de Sió es de extrema fragilidad. Las pequeñas variaciones que se dan por causas diversas, pueden hacer que deje de ser un hábitat y lugar de nidificación, apto para este tipo de aves.
Una de las causas de estos cambios en el entorno es la intensificación agrícola que se ha dado en las últimas décadas. La biodiversidad de este entorno estepario encuentra su equilibrio en la presencia de campos de cultivo alternados con eriales, barbechos, pequeños bosques, cabañas, taludes y márgenes. La presencia de cada elemento es importante e imprescindible para algún tipo de ave protegida. Cada especie tiene unas necesidades diferentes y en esta variedad, puede encontrar sus condiciones ideales. La tendencia a la reducción de los márgenes, la pérdida de eriales y barbechos, una época de siega cada vez más temprana y otros elementos relacionados con la actividad agraria y los usos del suelo perjudican esta variedad necesaria. La agricultura, por lo tanto, es un elemento clave para la conservación y la preservación de estas especies protegidas.
En esta ZEPA, las especias designadas como prioritarias son el sisón, la carraca, la calandria y el aguilucho cenizo. También aparecen el aguilucho pálido y el alcaraván.